En Exceptional Lives, intentamos abogar por la inclusión en todo lo que hacemos en nuestro trabajo. Escuchamos a nuestra comunidad para entender cómo podemos apoyarnos unos a otros.
Este es un valor fundamental de Exceptional Lives. Nuestro objetivo es apoyar a las familias y cuidadores de niños con discapacidades. Para hacer este trabajo eficazmente, tenemos que hacerlo respetuosamente. Tenemos que escuchar.
Los niños con discapacidades y necesidades especiales, antes que nada, son niños. Este es un ejemplo del lenguaje “primero la gente”, el cual reconoce que una persona no debería ser definida por su discapacidad.
Pero el lenguaje “primero la gente” no es para todos. Hemos aprendido de los autodefensores autistas que mucha gente en la comunidad autista prefiere el uso de terminología como “autista”, “persona autista” o “individuo autista”. Este es un ejemplo del lenguaje “primero la identidad”, el cual reconoce que el autismo es una parte intrínseca de una persona autistaa.
ELI celebra la neurodiversidad y creemos que el lenguaje que usamos debería reflejar eso.
Usamos el lenguaje “primero la gente” cuando hacemos referencia a la discapacidad (por ejemplo, “niña con discapacidad”), pero cuando se trata de la cultura de las comunidades autistas y sordas, usamos el lenguaje “primero la identidad”, como hacen los autodefensores en estas comunidades. Al tomar esta decisión, hemos aprendido de expertos como LaMondre Pough, que dice, “La comunidad decide como quiere ser llamada”.
Reconocemos que esta solución no es igual para todos. Algunas familias e individuos preferirán el lenguaje “primero la gente” y eso está bien.
En Exceptional Lives, mientras crecemos, seguiremos hablando y aprendiendo unos de otros. El lenguaje que usamos nos ayuda a hacer una diferencia en nuestras comunidades, y últimamente, nos ayuda a crear un espacio más inclusivo para todos nosotros. Únete con nosotros.
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